Recuerdos de viernes Santo.

Mañana es viernes Santo. Las celebraciones en Canadá (evidentemente) no son como en mi país. Aquí a parte de darles “puente” hasta el lunes, la verdad no he sabido de ningún evento en especial, supongo que habrá misa por parte de la iglesia Cristiana, Anglicana y Católica, pero no más. Digo, tampoco me he puesto a buscar qué hacer mañana, pero ni en la televisión anuncian nada.

El lunes pasado se transmitieron las primeras dos horas la película de “Los 10 mandamientos” y el martes las otras dos. Sin embargo aquí nada de películas sobre la crucifixión de Cristo, sobre su milagros, sobre su sufrimiento, su vida, etc… ninguna de estas programadas como, si es que mi memoria no me falla, se programan cada año por estas fechas en Televisa o TV Azteca. Películas horrendas, mal hechas (en su mayoría) que nos recuerdan en imágenes lo que el pueblo Católico debe saber sobre la vida y muerte de Jesucristo. Ya sea en caricaturas (porque yo llegué a ver más de una película animada), en blanco y negro o a colores, toda la programación semanal (o por lo menos la del fin de semana) era sobre la Semana Santa.

Mi familia suele ir a misa el viernes y obligarme a mí a asistir y el sábado como tradición siempre me dan “mi gloria”. Entiéndase esto como que me meten unos chingadazos para “crecer”, hecho que a estas alturas no ha tenido efecto alguno.

Muchas veces pensé que México era demasiado fanático con esta celebración (excluyo por supuesto a los que utilizan las vacaciones para irse a reventar en pedas interminables, que gozan durante dos semanas, los beneficios de ser pecadores y olvidar los tan bien aprendidos 10 mandamientos). Sin embargo, hace una año me tocó andar de gira turística por Guatemala, donde respecto a estas fechas, nos dejan cortitos. Las celebraciones más importantes se llevan a cabo en Antigua, una pequeña ciudad pintoresca, con aire de pueblo que refleja una realidad indescriptible sobre el pueblo Guatemaletco.

Cada año para recordar la muerte de Cristo, se hace una representación del “Via Crucis”. Pero a diferencia de la que se hace en Iztapalapa, aquí se trata de pasajes del nacimiento, vida y muerte de Cristo, que son construidas a tamaño real y se montan en tablas de madera pesadísimas que se cargan entre 80 y 100 personas, cada una de estas personas tiene que pagar por el “privilegio” de cargar las imágenes y lo hacen como sacrificio o manda. Es un acto de fe impresionante. (ver aqui)Pues además todas las calles por donde pasa la procesión se tapizan de flores. La procesión dura 4 días: jueves y viernes Santo, sábado de Gloria y domingo de resurrección. Y por si no fuera poco, el Lunes se hace una procesión parecida, pero con niños.

NO tengo fotografías aquí, pero pueden buscar en la web, para que vean a lo que me refiero. (http://www.galeria.enantigua.com/index.php).

Como lo comenté hace un año tuve la oportunidad de estar allá, hoy me tocará estar en un lugar mucho menos dramático y con otra visión de la religión y sus festividades.