Quiero ser tu profesor..... (A)

Hoy fui a una de esas juntas, a las que durante tanto tiempo temí... sí esas juntas de “maestros” donde se habla del bienestar del alumno y las enseñanzas que el profe debe ofrecer de manera firme, pero buena onda al montón de escolares.
Juro que nunca tuve la intención de ser maestra, lo juro, pero sucede que tampoco quiero ser desempleada y de las dos posibilidades y tras un par de experiencias de la mano de mi madre maestrosa, preferí enseñar que estar rascándome la panza como muchos egresados que esperan un trabajo de primera clase al mes de salir (casi milagrosamente) de la licenciatura.
Me preguntó si en realidad enseñar adolescentes será tan difícil como lo plantean.
Me pregunto qué dirán mis futuros gigantes alumnos de mi.... porque claro yo soy pequeñita, petite, tamaño miniatura y ahora los escuincles parece que comieron guisantes mágicos.
Me pregunto, qué apodo será el que me coloquen.... no me gustan los apodos, nunca me han durado los apodos, pero a esa edad, siempre fui de las que desde el otro lado de la banca sacaba (o divulgaba) ideas para rebautizar a los profesores, sin permiso de San Juan Bautista. ¿Quién seré ante sus ojos?.

No asusta lo que tengo que enseñar, me asusta lo que tienen que enseñarme ellos a mi. Pero lo confieso, eso de ser profa.. me emociona. Los retos me gustan, este es el primero de muchos que me faltan.