El miedo no anda en burro... no señor ahora anda en camiones.

Sucedió que a penas el miércoles pasado yo y mi compañera hablábamos de unos supuestos rumores de asaltos en los camiones foraneos (cabe aclarar que por la maestría viajamos cada semana) y de lo peligroso que se está poniendo ya no sólo habitar en cualquier parte, sino hasta viajar de una a otra.

Tras nuestra breve conversación, que concluyó al iniciar la discusión de clase quedamos como olvidando el tema; esos si yo en mi regreso a casa venía con el alma en un hilo viendo en cada sujeto un potencial asaltante. Nada sucedió, sólo el regreso más estresante e incómodo que he vivido en los últimos meses.

Sin embrago, mi amiga no tuvo la misma suerte... A ella si le salieron dos sujetos sin potencial, sino reales! El viernes que regresaba de GDL a Morelia, la asaltaron.. a ella y a todos los pasajeros del camión. Con pistola ne mano, a gritos, en medio de la nada y sin ni siquera parar el camión.

Cuando me contó no podía creerlo. Resulta que dos sujetos se pararon y quitaron a los viajantes todo lo que traían. Y no crean que en una línea de autobus de segunda: para nada ella viajaba en ETN.

¿Qué pasó cuando presentó u queja? NADA... como sabemos en este planeta no PASA NADA. ¿Por qué sería diferente esta vez?

Que tristeza, que miedo. Un hecho lamentable que resulta horrendo pensar el poder estar en es situación sin deberla ni temerla. ¿Dónde queda la seguridad del individuo? ¿Qué hay de la tranquilidad de viajar, de pensar que nada malo nos puede ocurrir?

Siento arraigado un profundo miedo. Y la inseguridad me hace temblar!

Diosito que no me pase nada! Como si fuera yo misma la imagen del país.... (dado que aquí nada pasa)