No quiero escribir sobre la Navidad, no considero un buen año para este festejo. No me malinterpreten, no estoy enojada con la fecha, ni soy malagradecida, ni estoy deprimida, ni de malas, ni soy grinch, es sólo que son muchas cosas...

Pues eso dicen...

Que sin tetas no hay paraíso. Y puede ser cierto, yo nunca lo he comprobado porque aunque en mis primeros años de adolescencia era como una tabla de surf.. la vida me fue componiendo y hoy no me siento para nada insatisfecha con mis medidas. Lo que si puedo comentyar (y por lo que empiezo a redactar este post) es que el libro de Gustavo Bolívar tiene una idea muy distinta de lo que las clases suburbanas buscan de la vida. Se trata pues, de un libro vertiginoso en la narración, con muy pocas descripciones profundas, pero que lleva de la mano a quien lo lee por las aventuras (y desventuras) de Catalina - Si igualito que en la serie colombiana o en la serie de univisión- que hace hasta lo que no por conseguirse un par de siliconas grandotas que le cubran esos pechos de niña que la hacen sentirse avergonzada de su humanidad.

Se trata de un libro muy recomendable que es entretenido y bastante amigable para entender cosas tan reales y a la vez tan inverosímiles... Aunque me cuesta imaginar el mundo de la prostitución, no dudo que ni tantito de lo narrado sea verdad en alguna parte del globo.

Tampoco siento tristeza porque alguien como anhelo máximo en al vida quiera estar "buenota", es más como un reclamo social de lo que se nos ha impuesto en este mudno tan materialista donde un par de chichis falsas valen más que tantas otras cosas...

Pero en fin, lean el libro.... y juzguen ustedes (OJO el libro, porque de la serie yo no garantizo nada)